Jaime Fernández Fuertes nació en Teruel en 1852. En 1873 fundó una relojería en la plaza del Mercado (actual plaza Carlos Castel) número 10. Su espíritu pionero, empresarial y con visión de futuro hicieron que, junto a otros proyectos, impulsara la sociedad eléctrica que en 1889 inauguró, a modo de ensayo, la iluminación pública en la capital. Asimismo, participó activamente en la vida social de la ciudad, formando parte de distintas asociaciones como el Ateneo y el Club Velocipédico Turolense. Murió el once de diciembre de 1928.<br /> <br /> <br />La gran pasión de Jaime Fernández fue la fotografía, arte que desarrolló con destreza y que constituye otro de sus valiosos legados. Su colección de instantáneas en negativos de cristal ha sido donada por su nieto, Miguel Ángel Fernández Ibáñez, al Instituto de Estudios Turolenses para su organización, custodia y fomento. Comprende 1.106 fotografías en su mayoría de carácter familiar, aunque también incluye una amplia colección de escenas que retratan la vida cotidiana de los habitantes de la ciudad, crónica inestimable de la sociedad de finales del siglo XIX y principios del XX. La intención documental del fotógrafo se manifiesta en la cuidada selección del emplazamiento de la máquina de fotos y en el uso de amplios encuadres