Ana Isabel Lanchas Estébanez (San Sebastián, 1966). Una constante vital, desde la infancia, es el arraigo y el amor que siente por la tierra de su padre, Salamanca. A este sentimiento de familia, casi ancestral, se le agrega un interés hacia la pintura donde, en determinadas ocasiones, desarrolla una actividad frenética que desemboca en distintas exposiciones. El cine y la escritura, también siempre presentes en su vida, completan sus inquietudes más primordiales.