Mario Molina Bonache. Comenzó en la UV su trayectoria universitaria, varias veces interrumpida producto de su inconformidad y crítica acérrima del mundo académico y sus avatares, que le llevaron a abandonar la Filología Clásica y trabajar como chapista y pintor de coches y como entrenador de tenis de mesa; finalmente, en 2024, en la UMU, logra concluir sus estudios de grado, de los que forma parte el presente trabajo.