El inquilino

Méler, Sofia

Tristán Ledesma, abogado de la multinacional Mundotur, viaja hasta Marbella para negociar el alquiler de los terrenos adyacentes al faro, propiedad de Autoridad Portuaria de Málaga, que debido a la crisis han sido ofertados. Además del contrato de alquiler deberá obtener las licencias necesarias para poner en marcha el proyecto. Sin embargo, se topará con una trama de corrupción que le pondrá las cosas muy difíciles. A sabiendas de que el proceso será largo, alquila la planta superior de una casa a las afueras del pueblo. Manuela Aguirre, propietaria de la vivienda vive en el piso de abajo, lo que obligará a ambos a mantener un contacto que ninguno desea pero que las circunstancias convierten en inevitable. Ambos arrastran un pasado oculto del que no logran desprenderse. Mientras, Tristán conocerá a Pedro Urbizu, el farero que todavía vive en el faro y que deberá abandonar cuando se materialice el alquiler de los terrenos. Un hombre complejo y diferente que le enseñará a mirar la vida de otra manera, convirtiéndose en un amigo más allá de las inmensas diferencias que les separan.
Una novela negra que ahonda en la soledad del ser humano y la imposibilidad, a veces, de conocer a los que nos rodean