En tierra de pan y de campos

un viaje por Castilla, entre Zamora y Palencia

Ródenas, Juan

En literatura y en arte todo es posible, y en el hombre sincero de la soledad germina fácilmente el comentario: un comentario directo sobre las cosas. Ése puede ser el mérito del presente libro, que copia del natural, para interpretar al capricho personal.
La obra de arte anárquica, como hecho de la naturaleza, carece de reglas aunque nazca conforme a ciertas de ellas y Pío Baroja se pregunta en su libro Las horas solitarias (1918): ¿Este paisaje es hermoso o es feo? ¿Es extraordinario o vulgar? El paisaje que en este libro se describe ha marcado la vida del autor y ha influido en su percepción de las cosas.
Si algún mérito tiene ser viejo es convertirse en memoria y los recuerdos que animan las páginas de este libro hacen a su autor joven, para poder transmitirlos. Sin creer en la exactitud de la crítica ni en que haya un valor estético, como un valor matemático, los textos aquí recogidos buscan, entre la descripción, la evocación y el ensueño, a quién pueden interesar. Aquí está, en esencia, lo que Rodenas Cerdá quiere transmitir después de un viaje por Castilla, en Tierra de Pan y de Campos. Rodenas Cerdá, autor de las ilustraciones del presente libro, practica la acuarela.