Jugando con dios... y viceversa

Frutos, Julián de

Julio Frías es víctima de una de las lacras de los tiempos modernos. El mobbing. En su quehacer diario se encontrará casualmente y sin desearlo, con un recurso que se le muestra como una defensa para poder soportar el acoso al que está siendo sometido.
El devenir de los acontecimientos le hará reflexionar sobre una parte de su persona que tenía descuidada y que interpreta como un toque de atención proveniente de un nivel más alto que el de la condición humana y terrenal.
Obra en la que se entremezclan diferentes estilos como el de la crítica social, el cuento, la novela romántica y el thriller.
Con un lenguaje cargado de ironía y un humor cáustico a veces, se retrata una serie de personajes que representan los diferentes biotipos habituales que cohabitan el animalario que conforma cualquier empresa con ánimo de lucro de nuestros días y que están sometidos a similares emociones y pasiones, con sus grandezas y sus miserias