Juguetes para niños ciegos

Darriba, Luz

Alguien, un amigo, me relató un hecho que tuvo lugar allí, en su villa. En un lugar tranquilo, reposado y aparentemente feliz. La historia era horrenda, descarnada. La condición humana llevada a los lindes de la crueldad y el sinsentido. La ceguera de unos años que insisten en no alejarse nunca del recuerdo.
Decidí contarla desde el lado de los victimarios, desde esa óptica que nos resulta tan lejana y desconocida, pero que vive en nosotros, en nuestros miedos, en nuestras bestias interiores. Dependiendo de a qué parte alimentemos, así transitaremos por la vida. Pero nadie se libra... O casi nadie.
Un niño ciego y otro que hace de lazarillo, dos almas ¿inocentes? nos abren las puertas de las que no sabemos si saldrá el tigre o la doncella. La luz o la oscuridad.
¿Jugáis?