Editorial: RH+ Ediciones (Ediciones 19)
Número de páginas: 502 págs. 24.0 x 17.0 cm
Fecha de edición: 01-09-2025
EAN: 9791387734121
ISBN: 979-13-87734-12-1
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Desde una perspectiva geoestratégica como la suscrita por Ortega, para quien el progresismo, es una actitud de hombres occidentales , no hay que juzgarlo por lo que predica, sino mirando a quien beneficia y a quien perjudica, amigo y ene-migo. El denominador común de las ideologías progresistas es una praxis paralizadora del progreso técnico de Occidente. Vástagos del pacifismo de la posguerra, indulgentes con el comunismo durante la guerra fría, los progresistas promueven un ecologismo idealista, doctrina incompatible con un tratamiento riguroso del equilibrio medioambiental. Fuerzan a Europa a limitar sus fuentes de energía dejándola en inferioridad ante adversarios que potencian las suyas. Los progresistas proponen la ideología de género para exigir la igualdad allí donde es un derecho mientras se alía con regímenes dictatoriales que la proscriben. Traicionando a sus conciudadanos, se asocian al islam, al imperialismo ruso, al populismo bolivariano, a la teocracia iraní, al neocapitalismo chino, mientras rechazan la cooperación de la OTAN y devalúan los distintivos occidentales: democracia, Estado de Derecho, división de poderes. El progresismo finge oponerse al capital, pero lo acoge si es dirigido por regímenes de partido único, como el chino o el ruso, el financiero saudí o cualquier otro que no sea occidental. Aparenta defender el ecologismo y el feminismo. Si los defendiera, los predicaría en China, los países islámicos o Rusia en lugar de reprender a Occidente cuya legislación igualitaria dejó de ser patriarcal y machista. El progresismo se distingue por su hostilidad hacia la cultura democrática liberal, el legado grecorromano, las raíces cristianas, mientras se muestra benevolente con el multiculturalismo despótico y teocrático. Cuanto ataca en su suelo, lo promueve sin miramientos en el ajeno. El progresismo se inventa un progreso ideológico que censura la tecnificación occidental y favorece el abastecimiento del rival. Desde el enfoque geoestratégico de La Rebelión de las Masas, la creencia progresista desmiente lo que promueve y contradice lo que practica. Estas páginas rastrean, desde su origen grecolatino, el itinerario intelectual que forjó la Modernidad, y los motivos por los que, al arribar la enfermedad progresista a su actual desorientación, la aboca a abdicar de su proyecto vitalizador.